MEDIALUNA
Medialuna ni te digo
porque sé que no comés.
La casa es grande
en mi cabeza
y en el aire.
Desde el balcón,
el instrumento
del pasado
que tocaba
Dire Straits.
Lanzaba como Borg
con cada saque
un motivo
de desesperación.
MIRADA
La mirada interrumpida al momento del rescate que vulnera la mañana es la línea de lectura que la vista agazapada atesora como máquina. Y en el salto me doy cuenta de que tengo que seguir por el don de no parar. Ya lo dije unas mil veces y la última una más en el plan depositario. Por el blanco sacrifico la bondad inmaculada que rehúso olvidar. En un día transcurrido no me dejo de tentar con la magra eternidad.
COPA
Cada copa es como un valle de resortes temporales entre gritos infantiles casi invocan la nostalgia. Es un prócer el que acerca la maldad en el desierto porque un pájaro que olvida en el trance ahora su eco. Hay un roce de las fichas que escanea los segundos puntería en la manguera y el cemento entre los yuyos. Sólo sé que el pino alto disparó los entrecejos de febrero son los gritos relicarios por decreto.
VÉRTICE
Cruce es General Paz y Balbín,
el mismo de maquetas en el margen sucesivo de soledades entradas. Mirar es conveniente sin pasar al lado plácido. Mirar pero al hacerlo una cuerda pide acordes o la toma que haga falta revelarlo una canción. La pregunta por el tono cuando nadie la esperaba, resultado de experiencias que sospecha la sembraba un contraste más osado.
PALIER
Arrepentido de ignorar la chance
cuando estancia es patrón y ruido
arrinconado enano el vértice
por permitir el internado.
Cómo te engancho la cola
es el inicio del reto
rico eslogan pretérito
e interrogantes disueltos.
La pelota es una incógnita
sin un piso y sin un techo
cuando llueve en los rincones
y resuelven los relojes.
Hay diez chicos a la espera
de que alguien diga algo
y un adulto responsable
revirtiendo la costumbre.
AGUA
El efecto austero
del agua entrometiéndose
en la mancha.
El cepillo giratorio
embebido en la olla íntima
de un falso feriado.
El libro ignorado
recupera el lustre
porque es negro y rosa.
Hay dos portarretratos
contenidos como pavos
los adornos altaneros.
La costumbre inalterable
de que sea el vegetal
endurecido por los años.
Habla, grita, pide comer
hasta que le diga
lo que lo calme.
CIERRES
Los cierres bajos
de los bolsillos
previenen dentro
la interferencia.
Es revivir la
experiencia
de la pirámide
cuando el autor.
Nada es lejano
con el botón
si pertenece
la flor a huella.
SOL
El sol en la cortina
anuncia la definición
del lado desplegado.
A la derecha escondido,
bastante incómodo
durmiendo parado.
En el medio la visión
entreteje la baranda
que contiene el inflador.
Más allá existe otra escena
imposible de contar
porque el sol no la ilumina.
TIRÓN
Cuando el ímpetu termine
porque nadie quiera ver
lo que queda reducido
habrá siempre un tiburón
explorando la TV
de deslices y antifaces
sin que lea de un tirón
en el zócalo huérfano.
Falta gente en los rincones
de la mata y un bosquejo
ante el tiempo es un resabio
perforando la penumbra.
Tomar nafta a la mañana
suena a viejo del consejo
como abuelo centenario
que comprime el acordeón.
Esa forma revisar
la madera inclinada
habilita la inversión
para el mueble en equilibrio.
GOLPES
Es con te y e
cada golpe del martillo
relatando la mañana
pero con te de ritmo.
La vecina no se entera
que acá adentro se cocina
una flor de la infusión
como avión de calesita.
El descanso es medio largo
y el silencio medio duda
interrumpe al coro loro
a la noche apoltronado.
No hay manera de saberlo
anterior aburrimiento,
no hay manera de saberlo
anterior aburrimiento.