lunes, 5 de abril de 2010

Diez poemas




DIARIO VAGO

I

Como rehén del Edén,
no estaría mal una noche de insomnio
por una madrugada negra,
de siluetas obtusas y cúspides.
Pero si esto es un sueño, no hay trato.
Como rehén de su día,
no estaría mal que me arrojen al agua
con aves, por el pasadizo de aire frío.
Pero si no hay verano y las estaciones no influyen,
no hay trato.


II

De a ratos percibo cuerpos
a mi lado,
que se esfuman y me burlan.
Me someto a la más vil intuición.
Nunca logro saber quiénes son.


III

Podría ser más fina la lluvia
y crucificarme en su aire.
No saber si el espejo de sus gotas
y las mías se confunden,
del ardor de la madrugada
como una vieja tormenta que aguarda
en jadeos interminables.

Los últimos sudores para la humedad
luminosa de los planos prados de artificio,
que gritan por la esfera y a mis ojos
liberan y dejan que estallen.
Recuerdos destemplados ascienden a otros pisos.
El sol y las estrellas, que parecen desterrarse,
transportan a mis clavos por su reino.

El tránsito ha paralizado Dios
y los cuerpos bondadosos han huido
del oro, de la plata, de tesoros y migajas.
Mis andenes a resorte opacan sembradíos.


IV

Tanta lluvia ha caído en estos días,
que mi ánimo, mi vagabundeo,
no se ha mojado sólo por estar en una habitación.
Los vidrios chorrean y en cada gota
construyen una ciudad.


V

Donde tiende el árbol la playa leve,
se disuelve en río y en sal.
La estrella rota desliza su relieve.
La crecida la aleja bajo estupores débiles.

El cartón entre su viento, perro hambriento.
Liviano, claro campo –el aire interrumpen colmillos de barro-,
vano sobre frutas cual luz, vidriosas a paso que dormita,
que oscuro lo agita en todo ese silencio.



SALDO

Todo lo que quiero hacer de la vida,
lo que no puedo es el saldo.
Mejor dicho,
ser explícito al despedirme,
propiciar nuevas citas,
dejar que el tiempo pase
y mandar un mail,
hacer llegar un texto de mi autoría
con lo curioso y relevante,
como considerar un episodio sobre otro.

Entre pilares de pensamiento,
mayor es el poder
de la frase mencionada.
Asimilable es la tensión
de la figura,
un tipo de subjetividad que no presenta
este mundo.
El poder,
como si todas las letras colocadas
fueran continuación de carencias vitales.



SALTO

El salto y el descanso,
la fuerza junto a la cortina
y una banda de sonido inadecuada.
Primero es la serpiente,
después el escarabajo.
¿Qué pasa conmigo entonces?
¿Lo he logrado?
Lamento tener que decirte
que me equivoqué,
que las palabras son más largas
de lo que pensaba,
que el escarabajo
pudo más que la serpiente
y que la banda de sonido
no era tan inadecuada como parecía.



CHINO

La hija del ídolo recorre
las góndolas de Akio
con su equipo de gimnasia.
Hay un grupo de amigos
de los cuales una chica
da a entender que vive
en el barrio.
En la caja ostenta anillos
por si el dinero que lleva
en un bolsillo interior de la cartera
no es el necesario.
Es decir, para estar en posición de trasladar
mercadería de un lugar a otro
sin que se sepa.



VICTORIA

Puede haber una victoria
y también de las muchas
que se conocen en los juegos,
las que muestran los carteles.
Estas flores son suaves
y el status de jirafa
nos hacía comprender
algún tipo de disposición.
Galletitas, zapatillas y pájaros
en picada libre entre sonrisas.
No todas las naranjas se engullen
y suele ser fría la mirada
del que mira al que mira siempre
y cuando no sea mirado
él también, a su vez.
Las redes crecen por todos lados
para grandes y para chicos,
aunque hoy no se vio el trío
femenino que logra
sentarse en el banco.
Puede haber una victoria
y también de las muchas
desplazándose en tacos altos,
anidando en las bocas y también
en los símbolos representativos
de toda una generación.



PATOS

Dos patos amarillos, con pico naranja,
se remojan en el balde.
Junto a ellos un bebé
busca diversión.
Pero no llueve y no dice
nadie, otra cosa que el charco.
Es la ensalada para otra cultura
o una orgía del plastificado.



CALESITA

Quien ha visto una vez
una calesita sacando fotos,
el protagonista que no lo podía creer
se puso a atravesar piernas levantadas.
Pero caminaba, no corría como suele
ocurrir en esas competencias.
Y sin embargo el movimiento de su paso
nos resultaba imperceptible.
La mayoría, como podíamos ver todos,
iba al centro, con la ilusión de tener
el mismo ángulo de visión
a izquierda y derecha.
Cuando caía la noche
el glotón no paraba de comer
todo lo que ocurría pocos minutos
antes de que empezara
la verdadera historia.



CURVATURA

¿Dónde se gradúa la curvatura del recuadro?
Siempre es más grande el ambiente
o mejor dicho de lo que recordamos
más chico, revestido de azulejos
hasta el techo. Músculo apenas camina
junto a la pared, con su granada de mano.
Los jamones se tambalean
y el esmalte cae de cuadrado en cuadrado.
Cuando entran los elefantes, se apura
que la granada estalle y las venas
del puño agreguen más líquido
en el escenario de la madrugada.



SINTETIZADOR

El gran sintetizador de alimentos
y diversión diurna
carece de espacios al aire libre.
Yo, por ejemplo, añoro
los maceteros de terraza,
los bancos sobre baldosas,
intentos de plaza que ni siquiera
era vieja. ¿Quién?
No se escucha… ¿Quién?
No se oye.
Desde la altura de un quinto piso
que parece décimo,
dos rodados sin nafta
prefieren descansar.



RESPUESTA

Es un ídolo el chabón,
pregunta y no responde.
Pone a otra a cantar,
toma un trago en la trastienda.
Hay que creerle, porque fuma.
El dúo es hermoso, hermoso.
Lo que hace es incentivar
el tráfico de jamones
por el fondo del río.
No hay apuro.
El invierno recién comienza
en las calles y en las piernas
que esperan el beso de despedida.
La respuesta llegará, supone,
cuando corra el telón
de cartón corrugado
y lo acusen de haberse enamorado
por cruzar el puente de un lado a otro.